El plan de la UEFA de beneficiar a clubes-Estado como el PSG provoca el acercamiento del Bayern de Múnich a la Superliga
El organismo del fútbol europeo tiene difícil mantener la contradicción que supone beneficiar a los grandes fondos qataríes liderados por el dueño del PSG para que controlen el devenir del fútbol europeo. Tanto UEFA como FIFA están en entredicho asimismo por cómo se adjudicó a Qatar, un país sin tradición futbolera y futbolística, la celebración del Mundial 2022.
Resulta significativo que el presidente del PSG, Al Khelaifi, haya sido nombrado máximo responsable de la Asociación de Clubes Europeos (ECA), organismo estrechamente vinculado a la UEFA, a la que pertenece como ejecutivo. De hecho, la UEFA pretende llevar a cabo una remodelación en el sistema del Fair Play Financiero que solo beneficiaría a clubes-Estado como el PSG (Qatar), Manchester City (Emiratos Árabes) y también ahora al Newcastle (Arabia Saudí).
Estos movimientos no pasan desapercibidos al conjunto del fútbol europeo, que ve cómo la UEFA se debilita por sus decisiones para favorecer a los clubes-Estado mientras la Superliga gana fuerza con el acercamiento de más clubes al proyecto. Fuentes cercanas a la Superliga rupturista con la UEFA inciden en que el PSG llegó a estar entre los clubes fundadores, pero que "las reglas de control financiero reales y serias" de este torneo habrían hecho a los cataríes inclinarse, finalmente, por el nuevo establishment UEFA, informa Vozpopuli.
Este diario añade que "la cosa puede cambiar después del Mundial en Qatar, y especialmente, si el PSG se saca ya la espina de ganar la Champions este año", citando fuentes cercanas a la Superliga. "Al final, un formato de torneo que enfrente más seguido a los poderosos es inexorable; el tema está en el reparto de poder, y el PSG quiere sumar más prestigio", añaden fuentes del mercado, que piden no olvidar la importancia del fallo del Tribunal de Justicia de la UE sobre la potestad legal de los promotores de la Superliga para organizar una competición frente al monopolio que ejerce la UEFA.
Para después del Mundial
Hace unas semanas, desde el entorno de Florentino se trasladaba que la resolución definitiva del TJUE podría llegar entre finales de 2021 y principios de 2022. Fuentes cercanas a la Superliga dicen ahora contemplar como posible que el horizonte del proceso judicial se dilate al verano de 2022 o más allá, lo que dificultaría un hipotético estreno en la 2022/2023.
Todo apunta a que,
tras el Mundial de Qatar,
empieza el tiempo de
la Superliga
La postura de la FIFA parece que se va modulando con respecto a la Superliga. En este sentido, el diario Vozpopuli publicaba que la FIFA vería con buenos ojos la Superliga europea bajo la premisa de que incluya un hueco al Supermundial de clubes que persigue la Asociación Mundial de Clubes creada por el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, y apadrinada por el presidente de la FIFA, Gianni Infantino.
El Bayern de Múnich, más cerca
El Español, por su parte, publicaba hace una semana una información bajo el título La Superliga gana fuerza: el Bayern de Múnich se acerca y la UEFA pierde la batalla por el Fair Play Financiero, en la que afirmaba que el plan del presidente de la UEFA se desmorona y la Superliga coge fuerza. De momento, lo que se conoce es que hasta ocho clubes están dispuestos a firmar un acuerdo vinculante para ingresar en la Superliga. Esta vez sus nombres se mantienen en secreto, pero se abre el prisma más allá de clubes españoles, ingleses e italianos. El cambio empieza a ser imparable, concluye el diario.
Y también se señala desde este medio que la UEFA, a la que la Justicia acorraló cuando se dio un ultimátum para que levantara las sanciones contra los clubes fundadores –a lo que accedió–, sigue debilitándose también fruto de sus propias decisiones. La que más está pesando es la remodelación que quiere llevar a cabo en el sistema del Fair Play Financiero y que solo beneficiaría a los clubes-estado, para quienes las multas previstas por incumplimiento de los protocolos financieros son poco menos que calderilla.
Todo apunta a que, tras el Mundial de Qatar, empieza el tiempo de la Superliga
